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Las semillas autoflorecientes son una revolución que cambió la manera de cultivar cannabis. Esta variación no necesita de muchos cuidados, crecen muy rápido y no requieren de fotoperiodos especiales. Y, aunque estas atenciones son mínimas, consigue cosechas de muy alta calidad.
Si quieres saberlo todo sobre estas semillas, sigue leyendo.
¿Qué son las semillas autoflorecientes?
Antes de nada, vamos a estudiar con detalle lo que son las semillas autoflorecientes.
En realidad, son el resultado de un cruce genético que ha necesitado de varias décadas para hacerse una realidad: cepas Sativas e Indicas con la variación de Ruderalis.
El tipo Rurderalis es capaz de sobrevivir en las condiciones más duras del planeta, en lugares helados. Han conseguido evolucionar para florecer sin contar con el ciclo de la luz, y es que en estos lugares escasea la iluminación de los rayos del sol.
Sin embargo, no encontrarás cepas ruderalis porque los brotes que produce la planta no son numerosos, ni fuertes.
Lo que se hace es crear semillas autoflorecientes: Se mezclan las propiedades autoflorecientes de la variedad de la ruderalis con cepas de cannabis Sativa e Indica.
El resultado es un tipo de semilla que tiene la potencia y la producción de las cepas de siempre, pero con una floración mucho más rápida.
Ventajas de las semillas de cultivo autoflorecientes
Rapidez
Si te preguntas cómo cultivar autoflorecientes, debes saber que los cultivos son fáciles de conseguir. Y es que tan solo necesitaremos aportarles una cierta cantidad de luz (y una reducción de horas para poder florecer). También controlaremos la humedad relativa, temperatura y evitaremos las plagas.
El proceso de cómo germinas semillas autoflorecientes también es sencillo. Hay muchos métodos (Fiffys, Lana de Roca, servilletas húmedas, tierra, agua…) y lo más habitual es que germinen en un tiempo de entre 2-5 días.
Algunas variedades pueden pasar de la semilla a cosecha en tan solo 10 semanas.
Son pequeñas y discretas
Las semillas autoflorecientes no solo son más productivas, si no también más pequeñas. No suelen superar los 1-1.2m de altura Así podemos organizarlas con mayor facilidad y resultarán más discretas si las queremos cultivar en un balcón, por ejemplo.
Es muy resistente
Cuando nos pongamos a hacer un cultivo autoflorecientes de exterior / interior paso a paso descubriremos que no tendremos que darle tantos cuidados como a otros cultivos. Y es que estas cepas son muy resistentes al frío, a las plagas y a las infecciones.
Por ello, son perfectas para casi cualquier parte del mundo, además de muy recomendadas para principiantes.
Adaptación
Las semillas autoflorecientes se adaptan a un cultivo de exterior como de interior.
En el caso de que queramos saber como cultivar autoflorecientes de interior, será cuestión de dejarlas bajo un ciclo de luz constante de 18/6 horas. En el exterior, tan solo se plantarán y se dejarán crecer.
Hazte con las mejores semillas autoflorecientes y conseguirás unas cosechas increíbles.